"Sin parabenes"

"Sin parabenes" …sin para qué?

No tenía ni idea de la existencia de esa palabra, pero parecía importante el hecho de que se me advirtiera mediante una etiqueta, así que pregunté al Mr. Google y no me gustó mucho lo que leí.
Al parecer es un componente "insecticida" muy utilizado en la cosmética de uso diario, jarabes par la tos, carnes, comidas congeladas y vete a saber qué más y que aunque no haya muchos estudios reveladores que avalen la afirmación de que pueden producir algunos problemas de salud, en Francia están totalmente prohibidos. Como los frasquitos de todo tipo tienen siempre la letra tan pequeñita y en color gris para dificultar todavía más su lectura, cogí una lupa, me fui al cuarto de baño y tenía frascos de productos “hipoalergénicos” con 3 o 4 parabenes. Me fui a ver los cosméticos de mi mujer y lo mismo, lo mismo en mi crema de afeitar de "marca blanca" y en el champú de mi hijo. Lo peor de todo es que también lo con tienen algunos alimentos, bollería, precocinados y hasta carnes. Llevamos toda la vida comiéndolos y tan contentos… luego algunos le echan la culpa a la coca-cola de tanto cáncer. Hay que ir a comprar con una lupa, porque los componentes no se leen con facilidad, no, no. Están escritos con letra pequeñita, en colores plata, grises sobre fondos claros, o rojos sobre fondos negros. La cosa es complicar. Lo que más miedo da es que ya hay muchos artículos que pone en su lista: “no contiene parabenes” y eso sí que da miedo, que ya lo pongan en la etiqueta. Hay una lista bastante identificable de los famosos parabenes o parabenos, o incluso parabens (en inglés) y también están camuflados con códigos. La mayoría de las enfermedades nos vienen a partir de lo que nos llevamos en el carrito del súper. Moraleja: mirad las etiquetas. Están obligados a poner la composición. El problema surge cuando no tenemos ni idea de qué es cada cosa, por eso decidí escribir este post.
Línea y Salud